1. Que reconozca que el embrión humano, desde la concepción, es un
sujeto titular del derecho de la vida. Que no se le niegue la titularidad de
ese derecho fundamental al no poseer personalidad jurídica; para ello es necesario
cambiar las disposiciones del Código Civil español.
2. Que no se permita que ningún ser humano pueda decidir la vida de otro
ser humano.
3. Que los fetos humanos con discapacidad funcional o capacitados diferentes, con malformaciones, con anomalías incompatibles con la vida, tengan la consideración de persona en el ordenamiento jurídico y no merezcan un estándar de protección jurídica inferior que los seres humanos de igual naturaleza sin esas “barreras”.
3. Que los fetos humanos con discapacidad funcional o capacitados diferentes, con malformaciones, con anomalías incompatibles con la vida, tengan la consideración de persona en el ordenamiento jurídico y no merezcan un estándar de protección jurídica inferior que los seres humanos de igual naturaleza sin esas “barreras”.
4. Que las autoridades públicas apoyen a los seres humanos con
diversidad funcional para afrontar su situación de discapacidad o enfermedad.
5. Que proteja la maternidad, es decir, una ley con medidas de apoyo
social y económico a las mujeres embarazadas, redes de apoyo y políticas
públicas dirigidas a reducir el número de abortos, sobre todo, políticas de
protección que facilite la conciliación entre vida profesional y vida familiar,
especialmente a las que se encuentran en situaciones de dificultad.
6. Intensificar el
acompañamiento a la madre a lo largo de todo el embarazo.
7. Que la alternativa a cualquier aborto sea facilitar la entrega del hijo en adopción. Para ello, es necesario incluir una revisión del procedimiento de adopciones con el fin de agilizarlo.
7. Que la alternativa a cualquier aborto sea facilitar la entrega del hijo en adopción. Para ello, es necesario incluir una revisión del procedimiento de adopciones con el fin de agilizarlo.
8. Que derogue la ley
actual sobre el aborto. Esta derogación se debe articular desde el objetivo de
la eliminación de aquellas leyes, regulaciones, costumbres y prácticas que
constituyen discriminación y vulneran la dignidad y el valor inherentes y los
derechos iguales e inalienables de todos los miembros de la familia humana con
independencia de sus diferencias.
9. Que no permita que las embarazadas menores de 16 años o mayores de
edad sujetas a tutela puedan abortar sin el conocimiento y el consentimiento de
sus padres o sus representantes.
10. Que prevea el derecho a la objeción de conciencia de los
profesionales sanitarios del aborto para inhibirse de cualquier participación o
colaboración en el aborto.
No tengo los suficientes conocimientos en materia jurídica para abordar y debatir este tema, pero sí me siento orgullosamente capacitada para escribir sobre lo fundamental de la vida humana: AMOR. Hoy estoy aquí frente a mi ordenador, gracias al amor que un día se entregaron mutuamente mis padres; hoy disfruto cada instante de mis hijas , gracias al amor que surgió, y aún perdura entre mi marido y yo y hoy gozo de una tremenda alegría e inmenso amor al escuchar la palabra Abu, Abu. Y ese amor se extiende ampliamente a los amigos, a los compañeros, a los conocidos, a todo aquel que junto a mí convive y vive. Yo amo!!! Yo vivo!!!!. El amor es el motor de la vida. Sin amor la vida está vacía, está desnuda y está desprotegida. Si amas con el corazón, con el alma, con cada célula de tu cuerpo, no habrá obstáculo alguno que detenga tu lucha y más aún el amor disipa las dudas, las incertidumbres, los miedos. La vida es amar . Amar es vida. La vida comienza en el mismo momento en que amamos. Y si en el mismo instante que amamos damos vida , eso dignifica al amor. Muchos jóvenes padres , gracias a las nuevas tecnologías se quedan estupefactos, sorprendidos, incrédulos algunos, al ver a su hijo moverse, chuparse el dedo. No se puede negar hoy en día esta evidencia: esa nueva vida es energía pura, esa vida ya “vive” en el antro materno, ya siente, rie, duerme y crece. Esa nueva vida tiene personalidad, dignidad y orgullo y mucho amor para dar . Patricia
ResponderEliminar